viernes, 10 de abril de 2015

Fue la sífilis la causa de la locura de Nietzche?





 Edvard Munch  (1863 - 1944) 

Friederich Nietzsche (1906)

Óleo sobre lienzo  
Thielska Galleriet, Estocolmo  



«La tierra, dice Él, tiene una piel, y esta piel está enferma. 
Una de las enfermedades que sufre se llama hombre»

F. Nietzsche. Así habló Zarathustra.     




Edvard Munch (1863-1944) fue un pintor y grabador noruego, figura precursora del expresionismo. Con su cuadro El grito (del que realizó 4 versiones) revolucionó completamente este estilo pictórico, influyendo considerablemente en la historia del arte. Solía afirmar que así como Leonardo da Vinci había diseccionado y estudiado el cuerpo humano para reflejar mejor su anatomía, él intentaba diseccionar almas para seflejar los sentimientos. Y fueron precisamente los sentimientos - en especial la angustia, la soledad, la muerte y el erotismo - los que se convirtieron en sus temas predilectos.  

No es raro que también realizara un retrato del filósofo F. Nietzsche (1844-1900) en el que afloraban estos y otros sentimientos. Nietzsche, fue un gran pensador, que influyó considerablemente en las corrientes existencialistas, fenomenológicas, postestructuralistas y postmodernos. Junto con Marx y Freud es considerado uno de los tres maestros de la sospecha

El 3 de enero de 1889 Nietzsche tuvo un colapso mental mientras se encontraba en la ciudad de Turín, en plena calle. Un cochero castigó duramente a su caballo en plena calle. Nietzsche intentó proteger al animal, rodeándolo con sus brazos y a continuación cayó desplomado. Tras este accidente, escribió unas extrañas cartas con claros signos de megalomanía y demencia a algunos de sus amigos (entre los que estaban la esposa de Wagner, Cósima Wagner, y el historiador suizo Jacob Burckhardt). A partir de aquí la locura se apoderó de él y lo tuvieron que ingresar en un manicomio de Basilea primero y poco después en una clínica psiquiátrica de Jena, dirigida por el Dr. Otto Binswanger. El resto de su vida lo pasó con las facultades mentales afectadas, en un estado psicótico, agazapándose en los rincones y bebiendo su propia orina. 

El origen de la locura de Nietzsche ha sido motivo de controversias. Se ha especulado de que su causa podría ser una sífilis terciaria. Es cierto que Nietzsche sufrió una sífilis, cosa por otra parte muy frecuente en aquel tiempo, pero no tenemos pruebas concluyentes de que su locura fuese causada por la sífilis terciaria. 

Por diversas fuentes sabemos que Nietzsche fue tratado de  sífilis en 1867, a los 23 años. Presentaba una inflamación ocular. Su médico, el Dr. Otto Eiser comenta las lesiones oculares y las que tenía en el pene, y destaca que había tenido diversas relaciones sexuales. En su historial clínico consta que había sido infectado por sífilis en 1866, lo que parece coincidir con las cicatrices que tras su muerte se hallaron en su pene al realizarle la autopsia. Algunos testimonios de la época sostienen que el filósofo se habría contagiado en un burdel berlinés durante su época de estudiante. 

Las cartas que escribió Nietzsche entre 1867 y 1889 nos proporcionan datos muy detallados sobre su sífilis secundaria (dolor, lesiones cutáneas, problemas de visión). En los últimos años de su vida, la euforia y desinhibición son evidentes. Éstos pueden ser síntomas de sífilis terciaria, que aparecen a medida que se produce una destrucción parcial de los tejidos cerebrales, y que conlleva un gran deterioro intelectual y disartria (dificultad en la articulación de palabras).   




E. Munch: Retrato de F.W. Nietzsche































La posible sífilis de Nietzsche fue una teoría muy bien acogida por sus detractores, que durante mucho tiempo se encargaron de propagarla. Especialmente tras la Segunda Guerra Mundial, ya que la teoría del superhombre nietzscheano había sido aprovechada por los nazis para justificar algunos aspectos de su pensamiento xenófobo. 

Sin embargo, recientemente algunos piensan que podía haber tenido otro origen, no infeccioso. Entre estas otras teorías, destaca la del tumor cerebral, probablemente un meningioma retroorbital. La hipótesis se sustenta sobre el hecho de que Nietzsche no presentaba la cara inexpresiva y el hablar lento de los sifilíticos terciarios. Los dolores de cabeza y los progresivos problemas de visión se explicarían por el progresivo desarrollo del tumor encefálico. 

Finalmente Stefan Zweig en su libro La lucha contra el demonio realiza una psicobiografía de Nietzsche donde defiende que la locura del filósofo tendría un origen exclusivamente psicógeno.  

Sin embargo, a pesar de estas alternativas, el origen luético de la locura y muerte de Nietzsche sigue planteándose como una de las hipótesis más difundidas.




Música: 
Lauretta Altman. Frederic Nietzsche (Presto y Fantasía)













No hay comentarios: